Hemos tenido unos días espectaculares en Portosin, dónde el sol nos acompaño todos los días que salimos a navegar. Pero ayer el día cambió radicalmente y volvió la lluvia típica de Galicia acompañada de una niebla espesa que cubría la ria hasta la hora de comer. Pero la lluvia tiene algo especial que también me agrada y más cuando ves los preciosos paisajes verdes absorbiendo el agua de que escupen las nubes. Pero es verano y no hay excusas para quedarse en casa. Como son las fiestas de Noia (el pueblo de al lado), aprovechamos el día para ir a dar un paseo por el pueblo y tomar unos churros con chocolate que se me habían antojado con la lluvia.
Gafas: Rayban
Jersey: Massimo Dutti
Pantalón: Salsa
Alpargatas: H&M